10 sept 2010

¿Por qué es tan difícil armar una red inalámbrica en casa?

Cada vez hay más equipos digitales para el hogar que se pueden conectar sin cables. Sin embargo, resulta una proeza lograr que todo funcione bien. Por qué pasa esto, y cómo solucionarlo.
Este adaptador Netgear envía las señales de Internet a través del cableado de la casa.

Cuando una de las primeras instrucciones que un popular router inalámbrico de Internet da a su propietario es la opción entre los protocolos de seguridad conocidos como WPA-PSK (TKIP) y WPA-PSK (TKIP) + WPA2-PSK (AES), el sector de redes domésticas tiene problemas.

La industria de la tecnología querría que todos pensáramos que gran cantidad de usuarios se dedica alegremente a hacer streaming de películas, feeds de Twitter, fotos y películas caseras de Internet a todos los televisores de la casa.

La realidad es que instalar una red doméstica para que todo eso sea posible es una tarea más ardua que la mayor parte de los proyectos de mejoramiento del hogar. Por otra parte, es aun más difícil hacer que una red funcione bien cuando cada miembro de la familia está en su propia computadora o con su propio teléfono inteligente, dedicado simultáneamente al streaming, el posteo o la navegación.

"La categoría inalámbrica nunca se hizo atractiva al consumidor", dijo Simon Fleming-Wood, un director de marketing de Cisco, dueña de la marca Linksys de equipamiento de red doméstica. "Cuando uno va a comprar productos de red, siente que está en el sector de plomería de un negocio de refacción de viviendas."

Si bien la idea de acceder a contenido mientras se pasa de una habitación a otra es interesante, en la casa no hay suficiente ancho de banda para manejar todo ese tráfico al mismo tiempo.

Preparar pochoclo en el microondas de la cocina para la película Netflix (un sistema de alquiler de películas de los EE.UU.) que se esperaba bajar del Wii puede desactivar la red, o el deseo de su esposa de ver videos de YouTube de bebés puede desacelerar su capacidad de bajar esa planilla de cálculo que su jefe está esperando que termine de revisar.

A todo el mundo le encanta la idea de lo inalámbrico, y ese es el problema. La mayor parte del tráfico inalámbrico viaja en la banda de 2,4 gigahertz, incluidos los teléfonos inalámbricos. Un microondas opera en la misma frecuencia. Si se pone un router inalámbrico demasiado cerca de cualquiera de los dos, con mucha facilidad se puede bloquear el router o reducir mucho el nivel de respuesta.

La red de su vecino puede hacer lo mismo. "La banda de 2,4 gigahertz no tiene licencia, de modo que todos los vecinos que usan esa frecuencia interfieren con su ancho de banda, y eso pasa cada vez más", dijo Chris Geiser, un gerente de producto de Netgear, una firma fabricantes de productos de red.

Los productos más nuevos usan el standard de Wi Fi 802.11N, que permite que una señal inalámbrica llegue más lejos que el standard anterior 802.11G, lo cual es bueno para llevar la señal al dormitorio de arriba, pero también puede mandarla al dormitorio de arriba de un vecino.

Algunos de los nuevos routers de standard N también usan una segunda frecuencia más alta, de 5 gigahertz, con la que no interfieren los aparatos de la cocina. El problema es que no todos los aparatos que buscan la señal inalámbrica pueden recibir esa frecuencia más alta. Por ejemplo, la PlayStation 3 de Sony y algunas PC sólo operan en la congestionada banda de 2,4 gigahertz.

El lugar donde se coloca el router puede alterar de forma drástica la distancia que la señal puede recorrer. Según Fleming-Wood, la potencia de la señal de un router inalámbrico puede reducirse mucho cuando encuentra paredes en ángulo oblicuo o trata de atravesar las cerámicas de la cocina o un dormitorio lleno de espejos.

Se puede extender el alcance de la señal de un router inalámbrico con un dispositivo llamado puente inalámbrico o extensor de alcance. (También se puede usar Wi-Fire, una antena externa de hField Technologies que aumenta la potencia de la señal.) Sin embargo, si la señal que sale del router no tiene la fuerza suficiente para llegar al puente, la conexión podría no ser confiable.

"El solo hecho de trasladar un router y colocarlo sobre un escritorio puede hacer toda la diferencia", señaló Joe Melfi, director de marketing técnico de D-Link, que produce tanto hardware inalámbrico como hardware de Internet conectado.

Una conexión cableada directa a la PC, la consola de juegos o el televisor con capacidad de Internet por lo general funciona mejor que una red inalámbrica. Según Geiser, de Netgear, la compañía recibe 70% menos llamados de consulta técnica en el caso de los productos conectados que en el de los inalámbricos.

Instalar una conexión cableada en la mayor parte de los ambientes de una casa es más fácil de lo que se piensa. Si bien por lo general no tenemos cables Ethernet –los cables gruesos de color azul o amarillo que tienen en los extremos grandes conectores del tipo de los telefónicos- en las paredes de la casa, hay una solución fácil: se usa un módulo especial para mandar la señal de Internet desde el router por el cableado eléctrico o de televisión por cable de la casa. La señal surge a través de un módulo receptor que se coloca cerca de la PC o el televisor que se quiere conectar a Internet.

"Una solución conectada sin duda es una opción mejor", afirmó Melfi.

No hay ninguna solución que sirva para todas las casas. Los productos de cableado eléctrico, que se conocen como HomePlug o powerline (la versión más nueva y rápida es HomePlug AV), pueden no lograr transportar múltiples streams de HDTV. La solución cableada, llamada MoCA, puede no funcionar si se usan cables coaxiales para recibir televisión satelital.

Las soluciones conectadas no sólo son impenetrables a la interferencia de otros aparatos o de las redes de sus vecinos, sino que también son más seguras. "MoCA es como un jardín amurallado", declaró Rob Gelphman, un ejecutivo del grupo MoCA Alliance.

A la mayor parte de la gente también le encanta la idea del streaming de video, y ese es el otro gran problema. El video exige una conexión a Internet que transmita más bits por segundo para proporcionar una imagen de alta calidad en su televisor.

Si bien una velocidad de conexión a Internet por cable o una DSL básica pueden bastar para acceder a la web y bajar música, es probable que haga falta aumentar la velocidad –y pagar más al proveedor de Internet- si se quiere hacer streaming de películas.

Para minimizar los problemas si se trata de hacer streaming de video de forma inalámbrica, hay que buscar un router que ofrezca streaming "Quality of Service". Con esos flamantes productos, el router da mayor prioridad al tráfico de video más exigente que a la bajada de datos de Internet.

Por ejemplo, el router WNDR3700 de Netgear (unos 150 dólares) da la mayor prioridad a las aplicaciones de voz sobre protocolo de Internet (llamados telefónicos que se hacen a través de servicios como Skype o Vonage), luego al video, los sitios web, las transferencias de archivos y bit torrents, en ese orden.

Algunos productos detectan y asignan prioridades de forma automática al contenido streameado, mientras que otros pueden exigir que el usuario establezca esos parámetros de forma manual.

La mayor parte de las empresas trata de hacer que todo esto se entienda mejor. Cisco ofrece su línea Valet de routers, que apunta a hacer que las conexiones inalámbricas sean más simples, libres de la jerga de la configuración. Los routers Netgear usan un programa de instalación al que se puede acceder a través de un sitio web.

La instalación de una red doméstica puede estar avanzando hacia un futuro simple, pero para llegar a ese punto lo más probable es que haya que seguir otra estrategia: comprar y devolver.

Por desgracia, los fabricantes de routers parecen pensar que eso es normal. Según Melfi, de D-Link, elegir el producto adecuado sigue siendo un proceso de ensayo y error.

"Es como ir al médico: hay cinco tratamientos para un mismo problema. Hay que elegir el mejor."




Cinco buenas ideas para aprovechar al máximo una conexión Wi-Fi en casa


La conexión inalámbrica no sólo despeja el ambiente de cables, también permite vincular numerosos dispositivos con gran espontaneidad. Y para sacarle el máximo provecho, se le pueden incorporar una buena cantidad de chiches.

El Wi-Fi es una de las tecnologías de comunicación inalámbrica más funcionales. Muchos equipos ya incluyen un receptor interno. Otros, aceptan una antena USB. Para segmentar las oportunidades de navegación, las cinco áreas mejor posicionadas son: música, impresión, movilidad, películas y curiosidades.

Con la variedad de radios online que circulan actualmente, no vale la pena acumular Gigas de música en la PC. Una excelente opción son las radios digitales que gracias a tener Wi-Fi sintonizan emisoras sin necesidad de pasar por la PC. En cambio, para quien busque un mediador, hay aparatos con Wi-Fi que a la frecuencia virtual le suman la reproducción de contenidos del disco rígido de la PC.

Y si hay varias máquinas en un ambiente, se puede lograr que toda la papelería confluya en una sola impresora. Sin ir más lejos, Lexmark tiene dos modelos de multifunción en el país: la Pro205 y la Pro709, que cuestan $ 750 y $ 1.000, respectivamente.

Y si bien la PC puede ser el centro principal de operaciones, otros aparatos más pequeños como celulares, netbook o notebook, que otorgan una mayor movilidad, pueden controlar los mensajes que llegan mientras está el partido. O permiten consultar los ingredientes de una receta desde la cocina y bajar aplicaciones desde la cama.

Trasladar archivos de foto y video de un equipos a otro es algo práctico. Esto se logra manualmente, activando la opción compartir la carpeta en Windows, o mediante WiPeer ( www.wipeer.com/es ) un software gratuito que sirve para jugar con otros amigos por red LAN o Internet. Existen también marcos digitales Wi-Fi para ver las imágenes almacenadas en la PC, en la pantalla del portarretrato o las que están en Internet. Y si la carpeta de la PC en donde se guardan las películas en Avi está compartida, el media Center de la PS3 lo detecta, y con un par de clics mediante, se puede disfrutar los filmes en el televisor sin tener copiarlos en un DVD.

Hay también una amplia gama de dispositivos curiosos que se vinculan a Wi-Fi. Por ejemplo, el conejo que avisa cuando llega un mensaje a la PC o el robot que monitorea la casa con su cámara.


Claves para armar la red

Para evitar inconvenientes con la conexión, es importante ubica el router, encargado de distribuir la señal por la casa, en un sitio abierto, lejos del suelo, ventanas y muros. Una estructura de hormigón con forjado de hierro absorberá la radiofrecuencia y perderá calidad en el enlace. Tampoco hay que ponerlo dentro de un mueble o rodeado de artefactos metálicos. Sobre estas cuestiones, Marcelo Fassardi Barbalaci, de Cables y Redes, ofrece algunos consejos. “El alcance de un router depende de la potencia y la ganancia que tiene su antena. Los de interiores, pueden llegar a unos 20 metros”. En cuanto al número de dispositivos que soporta una conexión “el máximo teórico son 250, aunque en la práctica son mucho menos. Lo que ocurre es que la red se satura y no brinda posibilidad de navegación. También es cierto que a medida que uno se aleja del router, disminuye la potencia de la conexión” indica Barbalaci.



TODOS CON WI-FI 1. Classic 600. € 200. Radio digital con entrada para MP3. 2. Squeezebox Touch. $ 3.000. Esta tableta táctil de
Logitech sintoniza radios online y reproduce música de la PC. 3. Spykee Robot Espía. us$ 400. Puede ser controlado remotamente para ver lo que ocurre en los diferentes ambientes. Tiene cámara y micrófono. 4. Nabaztag/tag. us$ 120. Anuncia los e-mails, lee las noticias y reproduce MP3. 5. Kodak Pulse. $ 400. Marco digital con pantalla táctil. 6. HP Photosmart C4780. $ 650. Equipo que imprime, copia y digitaliza. 7. Withings. € 120. Balanza que sube los datos a Internet. 8. LG GW620. $ 1.900. Teléfono inteligente con sistema Android.